viernes, 20 de junio de 2014

ARCANO No. 22 EL REGRESO

LETRA: THAU


En el CAPÍTULO anterior veíamos los Misterios de la Transmutación, ciencia que nos permite nuestra transformación.
El REGRESO, podríamos decir, es la culminación de una Obra y el comienzo de otra; en el REGRESO encontramos al hombre revistiéndose con la piel de tigre, símbolo del ocultismo práctico, con la Cruz TAO en su diestra, símbolo de la alquimia, con la guadaña, símbolo de la muerte mística, dispuesto En el REGRESO, encontramos el Poder y la Fuerza, resultados de nuestros trabajos conscientes en nuestra luna psicológica. Este Arcano nos define la ubicación que debemos tener frente a nuestro camino, frente a Dios y a nosotros mismos.
El REGRESO nos muestra un triunfo y nos permite continuar el viaje revistiéndonos con la Fe Solar, con la Sabiduría para encontrar los Misterios ocultos de nuestra Naturaleza Interior.
En este Arcano debemos integrarnos con nuestro Rafael Interior, el cual dirige en nosotros la salud; es necesario que vivamos practicando, diariamente, todos los métodos y sistemas que la Naturaleza nos ha enseñado pare conservar la Vida.
En las hogares donde se practica esta doctrina, no debe existir ninguna clase de violaciones de la Ley que atente contra la Vida.
A la persona que practica esta doctrina le está prohibido matar la Vida porque, él que quita la Vida pierde el derecho de vivir Esto hay que entenderlo a la luz de la filosofía oculta, nosotros estamos trabajando con la finalidad de prolongar la Vida hacia el más allá. Estamos en momentos en que se definen las dos formas de vida: "La Vida orgánica y la Vida espiritual".
La Vida orgánica es mecánica, se manifiesta en las corrientes que dirigen la Evolución y la Involución y la Vida espiritual se proyecta en octavas superiores estableciéndose en las diferentes dimensiones del Cosmos dando existencia real e inmortalidad. Quien viva esta doctrina debe procurar vivir sano. "MENTE SANA, VIDA SANA".
La Vida es una date que la Naturaleza nos da en la parte orgánica para que, desde allí, trabajemos para encarnar la Vida espiritual que continúa con nuevos organismos más allá de la tumba, expresando los valores conscientivos del Hombre y del Espíritu.
Se debe pedir al Arcángel Rafael que derrame en nosotros la Gracia de la Salud.